Jóvenes enfrentan provocación mercenaria de las Damas de Blanco
Cubanos enfrentan provocción mercenaria de las Damas de Blanco
Jóvenes desafían el clima y se van para calle G con #XAlfonso en concierto
Cientos de jóvenes cubanos desafían el mal tiempo y se van para calle G y Calzada con X Alfonso en Concierto. Tremendo. En nosotros y entre nosotros. Por los derechos de Cuba.
Esto es Cuba: Socialismo y derechos humanos
Hace unos días narraba en mi blog personal una vivencia simple y conmovedora. Eran cerca de las seis de la tarde. A doble paso, como suelo caminar, cruzaba la última esquina del Capitolio, frente a los restos del Teatro Campoamor —o Teatro Capitolio, como dice un letrero en su parte superior—, cuando vi a un hombre que yacía inconsciente en el suelo. «Es un borracho», pensé, y me dispuse a seguir. Pero a su lado otro hombre, desaliñado, sucio, que quizás también regresaba como yo de su jornada laboral, repetía angustiado: «parece un ataque de hipoglicemia». Insistía tanto que me detuve y miré, sin ver, claro, porque de medicina no sé nada. «¿Usted lo conoce?». «No», me dijo, «pero parece un ataque de hipoglicemia, mira como respira». Otro transeúnte se detuvo y opinó que debíamos buscar un auto que lo llevara al hospital. Éramos ya tres. Pero el cuarto en aparecer siguió de largo y todavía se atrevió a decir: «déjenlo, no es asunto de ustedes, si le pasa algo se van a complicar la vida». «Hay que ayudarlo», respondió decidido el tercero en llegar. Y el primero, el que nos detuvo con su letanía «hipoglicémica» gritó: «Oye, ¡esto no es Estados Unidos! ¡Esto es Cuba!». Entonces vimos llegar el carro. Los tres bloqueamos la calle, e hicimos señas. Después lo cargamos entre todos, y el vigía, el salvador anónimo, se montó junto al posible enfermo en el asiento trasero. No sé y probablemente no sepa ya si estaba borracho, o enfermo, cualquiera que sea su enfermedad, pero aquel salvador cansado, sucio, que pasaría inadvertido en la multitud citadina, me recordó que vivimos en Cuba. Leer más…